Medicamentos
El tipo de medicamentos que se usa con más frecuencia para el trastorno de déficit de atención con hiperactividad son los estimulantes. Diversas investigaciones muestran que estos medicamentos pueden ser muy eficaces. Como todos los medicamentos, pueden tener efectos secundarios y requieren que el proveedor de atención médica siga de cerca cómo puede estar reaccionando la persona al medicamento. También se encuentran disponibles medicamentos no estimulantes. A veces, los proveedores de atención médica pueden recetar antidepresivos para tratar a los adultos con trastorno de déficit de atención con hiperactividad, a pesar de que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) no los ha aprobado específicamente para tratar este trastorno.
Al igual que con todas las recetas médicas, las personas deben revelar al proveedor de atención médica qué otros medicamentos toman cuando hablen sobre los posibles fármacos para el trastorno de déficit de atención con hiperactividad. Los medicamentos para problemas frecuentes de salud en adultos (como diabetes, presión arterial alta, ansiedad y depresión) pueden interactuar con los estimulantes. En este caso, el proveedor de atención médica puede sugerir otras opciones de medicamentos.
Para obtener información general sobre los estimulantes y otros medicamentos utilizados para tratar los trastornos mentales, consulte la página web en inglés de los NIMH sobre medicamentos para la salud mental (www.nimh.nih.gov/medications). El sitio web en inglés de la FDA (www.fda.gov/drugsatfda) tiene la información más reciente sobre aprobaciones de medicamentos, advertencias y guías de información para el paciente.
Psicoterapia y apoyo
Aunque las investigaciones indican que la psicoterapia por sí sola puede no ser suficiente para abordar los síntomas centrales del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), su inclusión en un tratamiento integral puede ser beneficiosa para manejar los retos cotidianos asociados a este trastorno. La psicoterapia resulta particularmente valiosa cuando el TDAH coexiste con otros trastornos mentales, como la ansiedad o la depresión.
La terapia cognitivo-conductual, entre otras formas de psicoterapia, puede ayudar a los adultos con TDAH a aumentar su conciencia sobre las dificultades de atención y concentración, y a adquirir estrategias para mejorar la organización y la gestión del tiempo en las tareas cotidianas. Por ejemplo, puede enseñar a desglosar tareas complejas en pasos más pequeños y manejables, reforzar la autoestima y proporcionar técnicas para controlar los comportamientos impulsivos.
El apoyo de un consejero personal o de un terapeuta especializado en TDAH también puede ser útil, ofreciendo orientación específica para mejorar el funcionamiento diario.
Enfoques de salud complementarios
Algunas personas optan por explorar métodos complementarios, como el uso de productos naturales, para gestionar los síntomas del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). A diferencia de las terapias convencionales como la psicoterapia y los medicamentos, cuya eficacia ha sido demostrada científicamente, los enfoques de salud complementarios generalmente no han mostrado mejoras significativas en los síntomas del TDAH y no se consideran tratamientos basados en evidencia.